Alonso apunta a su primera victoria en una década en el Blockbuster de Barcelona

Fernando Alonso regresa al escenario de la última de sus 32 victorias en la Fórmula Uno este fin de semana con la esperanza de que una gran multitud y un golpe de suerte inesperado le ayuden a conseguir su 33ª.

Diez años después de ganar el Gran Premio de España de su casa para Ferrari en 2013, el piloto de 41 años se está deleitando en una racha que lo ha llevado a conseguir cinco podios en las primeras seis carreras de este año.

Esa secuencia incluyó su vibrante ascenso al segundo lugar detrás del doble campeón mundial defensor de Red Bull y líder de la serie, Max Verstappen, en el Gran Premio de Mónaco del domingo pasado.

Fue un resultado que impulsó el ya fuerte atractivo de taquilla del piloto bicampeón de Aston Martin para la carrera de este fin de semana en el Circuit de Catalunya, donde se espera una multitud récord de más de 100.000 el domingo.

Y Alonso, que disfrutaba de su renovada popularidad, no hizo nada para restarle importancia a sus esperanzas, aunque las mezcló con algo de realismo.

"Creo que Barcelona va a ser una celebración", dijo después de la carrera de Mónaco, en la que su intento de terminar con el dominio de Red Bull este año se deshizo por un error estratégico que lo vio desperdiciar una parada en boxes.

"Necesitamos mantener los pies en el suelo, así que no quiero crear demasiadas expectativas y presión adicional para el equipo.

"Habrá algunos fines de semana en el año en los que estaremos abajo en el séptimo u octavo y tenemos que aceptar eso, como hay otros cuando luchamos por un podio".

Agregó que no se conformó con el segundo puesto, su mejor puesto de la temporada.

"Es un paso más alto que los otros podios, pero aún aspiramos a hacerlo mejor y puede suceder si tenemos un poco de suerte o si Max y los demás tienen un abandono".

Alonso sabe, sin embargo, que es posible que no termine como el español o hispano más rápido este fin de semana, ya que tanto Carlos Sainz de Ferrari como Sergio Pérez de Red Bull tienen motivos para desear el éxito.

Su compatriota Sainz aún no ha saboreado la victoria en su tierra natal y mostró una figura frustrada el domingo pasado cuando terminó octavo para Ferrari, mientras que Pérez admitió que su fin de semana había sido un desastre personal.

Se estrelló en la calificación, partió desde el fondo de la parrilla y se clasificó 16°, dejándolo a 39 puntos de Verstappen en una carrera por el título en la que Alonso es tercero, a solo 12 puntos.

La carrera también será un regreso feliz para Verstappen, quien logró su primer triunfo en la F1 con Red Bull en España en 2016, pero Pérez sabe que tiene que redescubrir la consistencia y la velocidad que le dieron dos victorias a principios de este año.

"Mónaco fue un desastre para mí", dijo. "Todo lo que podría haber salido mal salió mal, así que este fin de semana se trata de comenzar de nuevo y asegurarnos de volver a los altos estándares que hemos establecido durante toda la temporada".

Aston Martin, Ferrari y Mercedes buscarán seguir el ritmo de Verstappen, quien el domingo obtuvo su victoria número 39 en Red Bull, superando el total del cuatro veces campeón Sebastian Vettel.

El holandés de 25 años seguirá siendo el hombre a batir en lo que probablemente sea una pista más rápida que la utilizada en 2022, gracias a la eliminación de una chicana del sector final.

Esto favorecerá a Red Bull, por quien Verstappen ganó el año pasado.

Otro triunfo, el 40, está a la vista el domingo.