España aplaude la llegada de la princesa heredera a la mayoría de edad en un impulso a la monarquía

La princesa Leonor, heredera de la corona española, juró lealtad a la constitución el martes, cuando cumplió 18 años, un hito legal que los observadores reales esperan que pase página para la monarquía después de varios años empañados por el escándalo.

Sus padres, el rey Felipe VI y la reina Letizia, y su hermana menor, Sofía, observaron cómo Leonor prestaba juramento ante una sesión conjunta de ambas cámaras del parlamento.

Afuera, una multitud que ondeaba banderas y vitoreaba vio la breve ceremonia en vivo en pantallas gigantes instaladas por todo Madrid.

"Estoy muy orgullosa de vivir un día así en España, debería haber sido fiesta nacional", dijo Blanca Palomares, una estudiante de 23 años que presenció la ceremonia en la Puerta del Sol.

Vestida con un traje blanco, Leonor juró lealtad en la misma copia de la constitución que su padre hace 37 años.

"Juro cumplir fielmente mis deberes, proteger y hacer proteger la Constitución y sus leyes, respetar los derechos de los ciudadanos y de las comunidades autónomas y ser fiel al rey", dijo.

Después estalló un fuerte aplauso en la cámara, cuando el rey abrazó a su hija mayor.

Las campanas de las iglesias sonaron en todo Madrid y el país y la multitud que miraba en las pantallas también estalló en aplausos y vítores.

Con el juramento prestado, Leonor puede suceder legalmente a Felipe y automáticamente se convierte en jefa del Estado en caso de ausencia del monarca.

Posteriormente, la princesa heredera condujo hasta el palacio real por las calles de Madrid, muchas de ellas decoradas con fotografías suyas.

"¡Feliz cumpleaños!" "¡Viva España!" Gritaron los espectadores.

Leonor ha conseguido ganarse el cariño del público y el último número de la revista de farándula Lecturas dedica esta semana su portada al auge de la "Leonormanía".

"No soy monárquico, pero el hecho de que sea mujer me hace un poco más comprensiva", afirmó Andrea, de 23 años, que llegó al centro de Madrid por curiosidad para presenciar la ceremonia.

Leonor habla francés, inglés y catalán además de español, y está aprendiendo un poco de gallego y vasco, dos idiomas regionales que se hablan en España.

Después de terminar su Bachillerato Internacional en el Atlantic College de Gales, la futura comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de España comenzó en agosto tres años de entrenamiento militar en una academia militar en la ciudad nororiental de Zaragoza.

Al igual que su padre Felipe, se espera que pase un año en cada sección de las fuerzas armadas, empezando por el ejército, antes de completar sus estudios universitarios.

Los partidarios de la realeza esperan que la joven y fotogénica Leonor pueda dar nueva vida a la familia real, que había sido golpeada en los últimos años por los escándalos que rodearon a su abuelo, Juan Carlos.

Juan Carlos subió al trono en 1975 tras la muerte del dictador Francisco Franco.

Era ampliamente respetado por su papel al ayudar a guiar a España de la dictadura a la democracia, pero un flujo constante de historias vergonzosas sobre su vida amorosa y su riqueza personal erosionaron su posición.

Juan Carlos no asistió a la ceremonia en el parlamento, pero los medios informaron que asistiría a una fiesta privada en el palacio de El Pardo, cerca de Madrid, más tarde ese día, la primera reunión formal de la familia real en la que estará presente desde que se exilió.

Cuando ascienda al trono, Leonor se convertirá en la tercera reina de pleno derecho de España (en lugar de una reina consorte), después de Juana de Castilla en el siglo XVI e Isabel II en el siglo XIX.