'Imposible seguir la pista': la apuesta española por el hidrógeno verde

Los principales proyectos de energía verde están surgiendo en toda España, ya que busca posicionarse como un futuro líder en energía verde, pero los expertos han pedido precaución sobre los costos y la incertidumbre de la demanda.

Las empresas españolas están aumentando la producción de combustible libre de emisiones e invirtiendo en proyectos de energía verde, a pesar de los temores sobre el alto precio de producción.

"Todo va muy rápido", dijo Miguel Ángel Fernández, director técnico del Centro Nacional del Hidrógeno de España, un centro público de investigación con sede en el centro de España.

"Hay tantos proyectos que es imposible hacer un seguimiento de todos".

Actualmente, la mayor parte del hidrógeno se produce utilizando combustibles fósiles contaminantes, pero el llamado "hidrógeno verde" se produce en su totalidad utilizando energías renovables, como la eólica, la solar y la hidroeléctrica.

Mientras que los combustibles fósiles emiten gases de efecto invernadero nocivos cuando se queman, el hidrógeno solo emite vapor de agua.

Madrid lanzó un plan de 1.500 millones de euros (1.700 millones de dólares) en 2021 para apoyar proyectos de hidrógeno verde, utilizando un fondo de recuperación de Covid de la Unión Europea.

España ahora alberga el 20 por ciento de los proyectos de hidrógeno verde del mundo, solo superado por Estados Unidos.

El año pasado, el gigante energético español Iberdrola comenzó a operar lo que dice es la planta de hidrógeno verde para uso industrial más grande de Europa, en la antigua ciudad minera de Puertollano.

La planta utiliza 100 megavatios de paneles solares para producir hidrógeno verde, que se almacena en enormes tanques de almacenamiento blancos.

El objetivo inicial es que proporcione el 10 por ciento de la energía que necesita una fábrica vecina perteneciente al fabricante de fertilizantes Fertiberia.

Esto evitará la emisión de 48.000 toneladas anuales de dióxido de carbono que calienta el planeta, según Iberdrola.

Si el proyecto piloto funciona, Iberdrola lanzará una "segunda fase mucho más importante" para cubrir el 100 por ciento de las necesidades energéticas de la planta de fertilizantes, dijo Javier Plaza, responsable de la división de hidrógeno verde de Iberdrola.

Empresas energéticas españolas rivales como Cepsa y Repsol han lanzado en los últimos meses proyectos similares.

En la soleada región de Andalucía, en el sur de España, se están invirtiendo tres mil millones de euros para crear un "valle de hidrógeno verde" donde dos grandes fábricas producirán 300.000 toneladas de hidrógeno verde al año a partir de 2027.

En la región norte de Asturias se construirán 15 parques solares de aquí a 2030 para permitir la producción anual de 330.000 toneladas de hidrógeno verde.

Rafael Cossent, profesor asociado de investigación en economía de la energía en la Universidad Pontificia Comillas de Madrid, dijo que había una "efervescencia" en el sector que colocaba a España en un papel de liderazgo en la producción de hidrógeno verde.

Esto se debe en parte a las abundantes capacidades de energía solar y eólica de España, añadió.

La Asociación Española del Hidrógeno estima que actualmente hay 50 proyectos de hidrógeno verde en desarrollo en el país.

España podría potencialmente producir suficiente hidrógeno verde para cubrir sus propias necesidades y exportarlo al norte de Europa, argumenta la asociación.

Sin embargo, un gran inconveniente del hidrógeno verde ha sido el alto costo de producirlo.

Si bien el precio de la energía renovable utilizada para fabricarlo se ha reducido debido a los avances tecnológicos, el hidrógeno verde aún no ha demostrado ser económicamente viable.

El uso masivo de hidrógeno verde también requerirá "transformaciones complejas" por parte de vehículos y plantas industriales que hacen que la demanda futura del combustible sea incierta, dijo Cossent.

Una economía de hidrógeno verde necesitará una infraestructura de transporte robusta para transportarlo, de la que España carece actualmente.

El gobierno cuenta con un gasoducto submarino planificado entre Barcelona y Marsella, denominado H2Med, que se espera que transporte unos dos millones de toneladas métricas de hidrógeno al año.

Sin embargo, el hidrógeno es difícil de contener sin fugas, lo que dificulta su almacenamiento y transporte, por lo que se esperan retrasos en la tubería.

Pero los gigantes del mercado del hidrógeno verde no se dejan intimidar.

Plaza de Iberdrola dijo que es importante meterse temprano en el hidrógeno verde porque "el que empieza primero tiene la ventaja".

"Estamos hablando de una carrera a largo plazo", agregó.